Entonces,
a buscar cuanto sitio en internet por si había aparecido algún remedio nuevo,
alguna terapia, algún medicamento eficaz. ¡Bah!
Poca cosa, luego de dedicarle horas y horas de mis días adoloridos. Al menos me
mantenía entretenida y algo nuevo siempre se aprende o se repasan cosas
olvidadas.
Pues
de vuelta al viacrucis de médicos (muy propios y a tono con el momento
cuaresmal), quiropráctico- ahora con terapia laser que de momento poco cambio noto, pero le daré una oportunidad de unas
cuantas sesiones a ver que tal y les cuento-. De vuelta también a las
clases de yoga, a los masajes y a
quedarme sin un centavo, porque con estos episodios y buscando opciones, el
dinero se va como el agua por el desagüe. Apenas empiezo con todo esto a la vez, con tal
de encontrar algo de alivio. Hay que darle tiempo. Unas cuantas
sesiones. En el pasado ha funcionado. Ya
veremos esta vez.
Es que marzo ha
sido un mes muy cambiante. Días de
frio, mas bien fresquitos, pero para nosotros los caribeños, los 70 grados/25 centígrados
son fríos. De repente, un día llega un
calor sofocante de 90 grados/32 centígrados. Cambian así como así, de hoy para mañana.
Esos cambios de temperatura mi cuerpo
los resiente mucho, demasiado y ¡fuacata! La crisis de dolor se activa, elevándose
a sus niveles máximos.
Se
juntan también las complicaciones de la vida. La familia de origen, que a
medida que envejece, requieren de nosotros los hijos adultos, pero que como
somos los hijos, estamos para recibir órdenes, no para darlas y nos hacen la
vida de cuadritos. ¡Caray, como les cuesta a mis adultos entender que están mayores y que
hay según qué cosas que ya no pueden hacer!
La vecindad, que también tiene a
cada personaje y se forma cada lío, que a una le dan deseos de salir corriendo
y mudarse a la casa del último ermitaño que haya vivido en el monte más alejado
de la capital. Todo eso aporta al
estrés de la vida en una ciudad donde, por cada vivienda, hay un promedio de 2 a
3 vehículos; la transportación publica es apenas existente y muy irregular y
para ir a cualquier parte –supermercado, farmacia, correo- hay que montarse en
el auto y coger cada tapón (atasco) impredecible.
Luego, llego
a la consulta del médico y me dice que “el estrés te complica los síntomas de
la Fibromialgia y el cansancio crónico que padeces”. Yo me
le quedo mirando con cara descuadrada, deforme por la noticia. “¡No me diga
doctor!” Como si me estuviera diciendo un milagroso descubrimiento científico.
Me pregunto entonces para qué rayos me hacen llenar tanto papel, pidiéndome tanto
detalle de mi condición con fechas, síntomas, tiempo desde que me han
diagnosticado, etc, etc, etc., si al
final el dichoso médico NO lee NADA de lo que escribo y me dice cosas que me sé
sin tener que ir a verle y que aprendí por experiencia propia en los años que
llevo viviendo con Fibromialgia, que ya son 14 años.
Por
todo esto y más, que no viene ni al caso contarles, es que quiero que llegue
pronto abril, a ver si con él, llega alivio para mi vida adolorida. ¡Así sea!
Te entiendo yo estoy igual, deseando se marche la lluvia, que me va tan mal, porque el frío te abriga pero la humedad,como la combates.
ResponderEliminarSaludos
Toñy de Sevilla
Gracias por tu mensaje,Toñy. Soy puertorriquena y aca no suele hacer tanto frio como en tu tierra pero hay MUCHA HUMEDAD. He tenido un mes muy malo como hace mucho no tenia y se que es debido a tanta humedad. Ya viene para ustedes las primavera! A nosotros nos cae el verano! pues aca siempre hace mas calor que fresco. Un abrazo de algodon con sabor a Caribe!!!
EliminarOrale, pues no son muy alentadores los comentarios, yo que la vida con fibromialgia y fatiga son una carga extra, a lo que de por sí implica vivir, pero hey!!! siempre hay algo que te hace llevadero el día por cual te levantas y luchas cada día, lo mejor de USTEDES, antes y después hay momentos en la vida que al recordar te llenan de fuerza, te motivan de alegría, te recargan, una canción, algunas fotografías, momentos en tu mente, recuerdenlos!!! eso no ha cambiado, sigue ahí con o sin la fatiga crónica con o sin la fibromialgia, la medalla que ganaste o la competencia que ganaste, los mejores momentos que viviste, TODO lo tienen ahi al alcance de un recuerdo una buena memoria, y no estarle dando todo el día, a cosas tristes que ni valen la pena... o no???
ResponderEliminarTienes TODA la razon!!! Aunque tambien es bueno desahogarse pues los dias malos tambien son parte de nuestras vivencias y a mi me ayuda poder expresarlo. Asi me mantengo en contacto con mi realidad -que tengo Fibromialgia y Fatiga Cronica- y tengo mis dias Buenos, los que son MUY BUENOS pero tambien tiengo mis dias dificiles y los que son muy malos. Esto es vivir con Fibromialgia. No somos distintos a otras personas. Cada quien tendra lo suyo. Un abrazo de algodon y GRACIAS nuevamente por compartir tus ideas y sugerencias. Siempre son y seran bienvenidas!!!
EliminarTe doy las gracias por compartir tu dolor, lo siento tano que te encuentres en esa condicion de dolor yo la estoy pasando me duelen hasta las pestana. Me siento tan cansada no tengo animo para nada, como diarian pr ahi tenemos el termostato roto y cada estacion del ano tenemos que peliarla. k Dios t bendiga siempre un abrazo de algondon.Cronny
ResponderEliminarTe cuento que en mi caso me ha disminuido los dolores un medicamento que es un antidepresivo sentralina 50 g empecé con la mitad en la noche 6 días y luego entero 6 días y al 12 dia empiezas con uno en la mañana, los primeros 4 días te sentirás muy cansada, pero luego todos los dolores disminuyen y todo es más llevadero y el paracetamol ayuda a bajar más el dolor, te deseo mucha suerte amiga, saludos desde Chile, mi correo es paisajista@msn.com, con cariño Isabel Silva
ResponderEliminarGracias Isabel. Yo tb tengo un tratamiento con una dosis baja de antidepresivo y un anticonvulsante. Tomo tramadol con acetaminophen cuando estoy muy adolorida. Aun asi, cuando viene una crisis, poco es lo que me hacen. Ya se que las crisis son pasajeras y que luego de unos dias me sentire mejor. Abrazos de algodon!
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